Qué puede estar ocurriendo para que algunos disfruten matando animales en claras condiciones de superioridad, ya sea con armas de fuego, trampas ilegales o rehalas de perros que los atacan y despedazan vivos. Empiezan de nuevo los pretendidos campeonatos de caza, que en realidad son masacres de cualquier animal, y en los que gana el que más mata, da igual cómo, dónde y por qué. Lo bueno es matar.

Qué puede estar ocurriendo para que algunos disfruten matando animales en claras condiciones de superioridad, ya sea con armas de fuego, trampas ilegales o rehalas de perros que los atacan y despedazan vivos. Empiezan de nuevo los pretendidos campeonatos de caza, que en realidad son masacres de cualquier animal, y en los que gana el que más mata, da igual cómo, dónde y por qué. Lo bueno es matar.

Qué puede estar ocurriendo para que la propia administración autonómica (Xunta) permita, colabore e incluso financie este tipo de sádicas actuaciones, en las que no establece ningún control sobre sus participantes ni sobre sus perros, ni siquiera con mínimo interés en comprobar que los propietarios cumplen la tan cacareada y pretendidamente fantástica ley de protección animal gallega aprobada hace poco más de un año.

Qué puede estar ocurriendo para que esta administración pública se posicione una y otra vez "en el lado oscuro", apoyando a quienes cambian bosques de robles por plantaciones de eucaliptos, fauna silvestre por páramos desolados, vida por desolación.

Qué puede estar ocurriendo cuando el 90% de los perros que las protectoras gallegas recogen son cruces de razas dedicadas a la caza, todos ellos sin chip, en terribles condiciones físicas y psíquicas, con experiencias atroces a sus espaldas que en ocasiones jamás llegan a borrarse, si quiera a difuminarse, y a nadie le importa.

Qué valores estamos transmitiendo a las siguientes generaciones, cuando lo que se premia es la violencia, el abuso de superioridad, y el todo vale en nombre del dinero…

Qué podemos hacer cuando parece que todo da igual, que las mayorías absolutas aplastan a todo lo que se les opone. Lo que podemos hacer es no bajar los brazos, de nosotros depende que algún día el mundo sea mejor, que algún día los bosques sean lugares llenos de vida, lugares de esparcimiento, disfrute sin miedo y observación de fauna, lugares de los que sentirnos orgullosos. Nos queda manifestar nuestra queja (envíala a gabinete.cmatv@xunta.gal), apoyar a quienes están dispuestos a ir un poco más allá, y tratar de hacer un consumo responsable, sin olvidar nunca qué municipios, organismos, empresas privadas, etc., apoyan estos actos tan salvajes y cobardes.